Jarrón deformado por el fuego hecho con arcilla refractaria salvaje de Terra Alta (Tarragona). Esmaltado con granito rosa de la Costa Brava (Girona) y ceniza de madera de abeto. Quemado a 1300 ºC en atmósfera reductora durante 11 horas en un horno de gas manual. 
 
Esta es la única arcilla que he recolectado hasta ahora capaz de aguantar 1300ºC. Eso se debe a la cantidad de caolín que contiene, y sus colores a las diversas impurezas que tiñen el suelo donde lo recolecté (óxido de hierro, etc), de ahí el tono rojo y metalizado de la pieza. Consigo ese aspecto oxidado gracias a la atmósfera reductora de la quemada, que en este caso fue muy intensa. 
Al estar colocado al lado de la entrada del quemador, la arcilla empezó a colapsar al superar su punto de fusión, por lo que la base se deformó hasta pegarse a una baldosa de arcilla comercial que había debajo. Por suerte la pieza no llegó a fundirse del todo y ahora ese azulejo es lo que permite que se apoye de forma estable sobre su nueva barriga. Quise acabar de decorar la pieza con esmalte de granito rosa de la Costa Brava, calcinado y posteriormente hecho polvo en el mortero de forma manual. El granito, mezclado con ceniza de madera de abeto es ese esmalte verdoso que cae sobre un lado de la pieza.
 
Altura: 16 cm.
Diámetro: 20 cm.
 
 La arcilla paleógena de Terra Alta es una de las pocas arcillas salvajes de Cataluña capaz de aguantar 1300ºC gracias al caolín que la forma. Este barro es rico en varios minerales como el óxido de hierro, lo que permite ese tono metalizado de la pieza. Este material fue recolectado en una cantera ahora abandonada, por lo que el impacto paisajístico y ecológico fue mínimo. Una vez recolectada, la arcilla fue tamizada para sacar las piedras y raíces.